domingo, 12 de marzo de 2017

Planeaciones



Planeaciones 2016 -2017 para imprimir (México)










Día del escudo Nacional argentino

El escudo de la República Argentina fue aceptado oficialmente el 12 de marzo de 1813 por la Asamblea General Constituyente de ese año. Aun así, se conservan documentos emitidos por la Asamblea que testimonian que antes de conocerse el decreto que aprobara su diseño ya se empleaba el actual escudo, habiéndose utilizado con anterioridad a este el escudo de armas del Virreinato del Río de la Plata.

A pesar de la ausencia de sanción legislativa, el hecho de que Manuel Belgrano lo usara como símbolo central del gallardete de las tropas emancipadoras consagró el emblema, siendo adoptado por pueblos y gobiernos como símbolo de la nacionalidad argentina.


martes, 20 de diciembre de 2016

Fin de ciclo 2016

Mis amores dos personitas excelentes  desde todo punto de vista.Cariñosos, respetuosos, responsables que se merecen ampliamente el lugar que a partir de hoy les tocara ocupar.Me siento orgullosa de haberlos tenido como alumnos.




lunes, 21 de noviembre de 2016

Importancia de la Ortografía

La ortografía es la base del buen entendimiento. Estas son las razones.- El lenguaje humano es un fenómeno altamente complejo que ha ido agregando elementos casi interminablemente hasta el punto de necesitar un conjunto de reglas y explicaciones que permitan, al escribirlo, entender la metodología, los símbolos y los sonidos más complicados. La ortografía nace entonces como el conjunto de reglas y normas escritas más completo para entender cómo realizar una redacción apropiada. Si bien estas reglas suelen parecer muchas veces arbitrarias, tienen una gran razón de ser que es diferenciar distintos sonidos que en el lenguaje oral se confunden y deben ser distinguidos porque se producen de un modo diverso. Por otro lado, la ortografía es lo que permite que uno pueda entender lo que otro escribe ya que si no existieran estas reglas sería realmente imposible en muchos casos la comprensión de algunas palabras. Se considera que gran parte de la ortografía se aprende básicamente por la lectura continuada de textos más que por la memorización de cada regla.

La ortografía como sistema de verificación del lenguaje. Sus partes y elementos

La correcta transmisión del Lenguaje tiene distintos niveles de verificación, teniendo por un lado un criterio Semántico otro que es conocido como Pragmático y por último un criterio Sintáctico, que nos permite analizar propiamente al mensaje emitido, a saberse:

Semántico: Relativo puramente al significado del mensaje, siendo generalmente relacionado a la correcta utilización del lenguaje.
Pragmático: La respuesta que tiene el receptor del mensaje al recibir el mismo, teniendo en cuenta la correcta utilización del Lenguaje, su interpretación y el contexto del mismo.
Sintáctico: La utilización ordenada de las palabras dentro de un mensaje, analizando la estructura del mismo y el modo en que se combinan no solo las palabras, sino también los Signos de Puntuación, para poder dar un sentido unívoco y no se libre a varias interpretaciones.

En este último criterio es que encontramos enmarcado el concepto de Ortografía, ya que es justamente las Convenciones y Reglamentos que se han fijado arbitrariamente para un sistema de escritura perteneciente a un lenguaje determinado, por lo que es comunmente conocidas estas reglas como Normas Ortográficas. Es importante señalar que la ortografía no es siempre estática sino que todos los idiomas actualizan permanentemente sus reglas incluyendo palabras y modismos nuevos del lenguaje.



La historia de la ortografía y su relevancia en la construcción del lenguaje

Como todo, la ortografía también tiene su historia. Cada uno de los idiomas más importantes y hablados del mundo tiene una academia o institución aceptada para establecer las reglas de uso del idioma. En el caso del lenguaje español y las versiones castellanas, podemos decir que las primeras reglas y normas ortográficas fueron dadas a conocer en el año 1727, con la difusión de las mismas por parte de la Real Academia Española, a poco tiempo de haber sido fundada esta institución, dejando de lado las falencias que tenían adaptar estos signos a las Pronunciaciones Orales, o bien a lo relativo a la Etimología de la Palabra, lo que llevaba a una libre interpretación y a veces hasta distintos criterios para poder interpretar el mensaje, con un desfasaje entre emisor y receptor.

Su principal asentamiento se dio en el año 1854, con la publicación de La Ortografía de la Lengua Castellana, teniendo muy pocas modificaciones desde entonces, contando con adaptaciones etimológicas y fonológicas, ya que las letras pueden representar gráficamente fonemas idénticos en algunos ejemplos, diferenciándose de la fonética, pero no por ello dejando de lado la conservación de caracteres de una misma fonética, como en el caso de la B y V, por ejemplo. La Real Academia Española realiza un trabajo permanente de re-acomodación de las nuevas reglas o modismos que pueden surgir, muchas veces incluyendo nuevas formas que se empiezan a dar espontáneamente, se vuelven masivas y se deben tener en cuenta como formas del lenguaje. Estas nuevas formas al tiempo de ser aceptadas por la Real Academia Española se transforman en versiones oficiales del lenguaje.

Como ejemplos de reglas ortográficas podemos destacar la admisión de una tilde en las letras vocales (A, E, I, O, U) para poder indicar sílabas acentuadas, o la inclusión de una diéresis para indicar la sonoridad de la letra U en las sílabas Gui y Gue.

... de Importancia: http://www.importancia.org/ortografia.php








sábado, 29 de octubre de 2016

La Rueda de los Alimentos y su Implementación

Un recurso que sirve como apoyo al día mundial de la alimentación y que nos será de gran utilidad a la comunidad educativa en general tanto a docentes como a alumnos y padres de familia. Es un material interactivo de gran atractivo y beneficio para todos los niños en edad escolar. Puedes acceder a este recurso desde el enlace que hemos colocado bajo la imagen.

martes, 30 de agosto de 2016

Los efectos sobre el cerebro de escribir en cursiva



La escritura en cursiva hace a los niños más inteligentes

Escrito por William R. Klemm, D.V.M, Ph.D.en Memory Medic

¿Alguna vez has intentado leer las prescripciones de tu médico? Los niños escriben con mayúsculas con mayor frecuencia porque no saben escribir en letra cursiva (también llamada “manuscrita” o “de carta”) o su letra cursiva es ilegible. Tengo un nieto que va a secundaria y le cuesta entender su propia letra escrita. Los abuelos se encuentran con que sus nietos son incapaces de leer lo que les escriben. Nuestro nuevo Secretario de Hacienda de los EE.UU. no sabe (o simplemente no lo hace) escribir su propio nombre en la nueva moneda a emitirse.

Una de las primeras cosas que aprendimos cuando nosotros, los adultos, íbamos a la escuela era cómo escribir el abecedario en letras mayúsculas y minúsculas y, luego, cómo escribir palabras, oraciones, párrafos y ensayos a mano. Algunos de nosotros tuvimos la suerte de tener clases de caligrafía donde aprendíamos cómo lograr que nuestra escritura sea linda y legible. Actualmente, la escritura en el teclado está de moda y los Estándares Educativos en EE.UU. ya no requieren que los estudiantes de la primaria aprendan a escribir en letra cursiva. Es más, algunas escuelas rechazan dicha enseñanza ya que la consideran una “habilidad del pasado”.[1]

Según Zaner-Bloser Inc., una de las editoriales del país especializadas en la escritura manuscrita, la enseñanza de escritura manuscrita en las escuelas primarias supone poco más de una hora semanal. La escritura en letra cursiva no se enseña generalmente después del tercer grado (yo tenía clases de caligrafía en 7º grado; a lo mejor es una coincidencia, pero fue en 7º grado cuando mágicamente pasé de ser un estudiante mediocre a uno excepcional).

Sin embargo, los científicos están descubriendo que el aprendizaje de la letra cursiva es una herramienta crucial para el desarrollo cognitivo, particularmente para entrenar el cerebro desde el punto de vista de la “especialización por áreas del cerebro”[2], es decir, del rendimiento óptimo. Mediante el aprendizaje de la escritura en cursiva, el cerebro desarrolla una especialización por áreas que integra la sensación, el control del movimiento y el razonamiento. A diferencia de la escritura en el teclado y la práctica visual, según estudios de tomografías del cerebro, diversas áreas del cerebro se co-activan durante el aprendizaje de la escritura en cursiva.

Existe un beneficio externo para la habilidad de razonamiento que se emplea en la lectura y escritura. Para escribir con una letra cursiva legible se necesita un cierto nivel de control de motricidad fina sobre los dedos. Los alumnos deben prestar atención y pensar qué están haciendo y cómo lo están haciendo. Tienen que practicar. Estudios con tomografías cerebrales revelan que la cursiva activa áreas del cerebro que no están involucradas cuando se escribe en el teclado.

En general, muchos de los beneficios de escribir a mano derivan simplemente de la mecánica de trazar letras. Durante un estudio realizado en la Universidad de Indiana y que se publicará este año[3], investigadores analizaron, mediante imágenes de resonancia magnética, a niños pre-alfabetizados de 5 años de edad antes y después de que fueran instruidos en el aprendizaje de la cursiva. En aquellos niños que habían practicado a mano la escritura, la actividad neuronal fue mucho más destacada y similar a la de los adultos que en aquellos niños que simplemente observaron las letras. El “circuito de lectura” en el cerebro, el circuito de áreas asociadas que se activan durante la lectura, se activó al trazar la escritura manuscrita, no así al escribir sobre el teclado. De la misma manera, esta investigación demostró que escribir letras en un contexto significativo, contrapuesto al de sólo dibujarlas, activa de forma más sólida diversas áreas en los dos hemisferios.

Al aprender la escritura manuscrita, incluso si se trata de la escritura en mayúsculas, el cerebro de un niño deberá:
Distinguir cada trazo respecto a otros.
Aprender y memorizar el tamaño adecuado, oblicuidad de la forma global y la característica detallada de los rasgos de cada letra.
Desarrollar habilidades de categorización.

La escritura en letra cursiva trae consigo aún más beneficios que la escritura en mayúsculas, ya que los movimientos son más difíciles, las letras menos estereotipadas y la necesidad del reconocimiento visual crea una mayor variedad de formas de representar las letras. Además, la letra cursiva es más rápida y más atractiva para los estudiantes ya que les da un mayor sentido de estilo personal y pertenencia.


Otro estudio destacó la relación exclusiva que existe entre la mano y el cerebro a la hora de pensar y tener ideas. Virginia Berninger, una profesora de la Universidad de Washington, dio a conocer su estudio sobre niños en primer, segundo, cuarto y sexto grado, en el cual revelaba que los niños que escribían más palabras, más rápidamente y expresaban mejor las ideas cuando escribían ensayos a mano que cuando lo hacían sobre un teclado.

Existe todo un campo de investigación conocido como “háptica” que comprende las interacciones del tacto, movimientos de la mano y funciones del cerebro. La escritura en letra cursiva ayuda a entrenar el cerebro con el fin de integrar la información visual y táctica así como también la habilidad motora fina. Se está volviendo una obsesión para los sistemas educativos, a cargo de ideólogos desinformados y de instrucciones federales, evaluar conocimientos a costa del entrenamiento de niños para desarrollar una mejor capacidad de adquirir conocimientos.

Los beneficios para el desarrollo cerebral son similares a lo que se obtiene cuando se aprende a tocar un instrumento musical. No todos pueden pagar clases de música pero todos tienen acceso al lápiz y al papel. No todos pueden comprar un ordenador a sus hijos (a lo mejor estos niños no son tan desafortunados como creemos).


Artículo original: http://www.psychologytoday.com/blog/memory-medic/201303/what-learning-cursive-does-your-brain

Traducido por Selene Fernández